5 curiosidades del cerdo ibérico

Los cerdos ibéricos son conocidos por su carne suave y sabrosa, y los cerdos que viven en libertad en el campo son los mejores ejemplos de esta raza. Estas son las cinco curiosidades del cerdo:

1. ¿Qué nos comemos del cerdo?

Del cerdo ibérico aprovechamos la mayoría de sus partes: rabo, patas, morro, orejas...La mejor forma de aprovechar todas sus partes es saber cortarlo de manera adecuada, sin dejar nada atrás. El jamón es la parte más cotizada del cerdo ibérico por su exquisito sabor, aunque a veces, resulta complicado elegir una pieza para los menos expertos.

2. ¿Cómo es su dentadura?

Según el estado en el que se encuentre el cerdo ibérico, se alimentan de una forma diferente. Si hablamos de cerdos salvajes, su dentadura está adaptada a masticar hierbas, ya que en este estado son herbívoros. Si se encuentran en cautividad, son omnívoros, se alimentan de todo. Pueden llegar a alimentarse de carne, pero debe de estar muy bien picada.

3. Podemos llamar al cerdo de diferentes formas.

Si no supera los cuatro meses de edad, lo denominamos "gorrino", pero cuando todavía son amamantados se les llama "cochinillos" o "lechón". Al macho que lleva a cabo la reproducción lo conocemos por el nombre de "verraco". Por último, se le llama "cerdo" cuando ya está cebad y listo para la matanza.

4. ¿Por qué los cerdos se revuelcan en el barro?

Los cerdos protegen su piel gracias al barro, ya que no poseen glándulas sudoríparas, y de ahí su hábito a embarrarse.

5. Existen cerdos nadadores.

Existe una población de cerdos nadadores en el archipiélago de Exuma Cays en las Bahamas. Unos marineros abandonaron a un grupo de cerdos y a lo largo de los años se adaptaron al lugar y aprendieron a nadar.

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